27 octubre 2006

¡Lo que digan los novios!

Llega otra tonta solemne. Esperanza Aguirre ha declarado que en su comunidad (el su en su más ámplio sentido de adjetivo posesivo) se podrá fumar en las bodas si así lo quieren los novios...
Pues, ¡que vivan los novios!, ¡basta de bodas aburridas!. Apunto unas cuantas conductas delictivas que podrían celebrar... si los novios quieren...
- Hacer botellón a la puerta de la inglesia
- Fumar petas (¿aún se dice peta?), hacérse rayas, las pastis, etc
- Orinar, potar, etc frente al salón de banquetes
- Permitir actos vandálicos. Total, si los caleborrocos pueden, y si los novios quieren, luego ponemos contenedores y cabinas nuevas.
- Violencia doméstica, contra los animales, asesinatos, etc
- Tráfico de drogas, blanqueo de capitales
- Guerras ilegales... (voy a parar que me estoy emocionando)
Oye, que es su día, qué importará una leyezucha del incompetente gobierno de esa España que se rompe, esa misma en que los socialistas están haciendo que los ciudadanos tengan unos derechos u otros dependiendo de la comunidad autónoma en la que vivan.
Ya sabéis, en la comunidad de Madrid puede vulnerarse la ley (lo dice el Consejo de Estado)... si los novios quieren.

2 comentarios:

Pepe Soriano dijo...

¿Actos sociales? Un bautizo es un acto social (¿o todavía se considera religioso?). Pues entonces que decida el bebé.

Aunque sabiendo del "anfitrion" lo de potar y cagar está permitido... ¡¡ seguro !!

bang dijo...

Una pregun que se me ocurre. Si en mi trabajo organizo una fiesta para celebrar mi boda, ya sabes, papas, cacaos, unas tortillas de patatas, cerveza... Si decido yo (el novio), ¿se puede fumar en mi centro de trabajo?...
Os informo que yo no fumo, pero ¡con tal de tocar los cojones!