03 octubre 2008

Dios sabe que no soy religioso...

Y cualquiera que me conozca, o que haya echado un vistazo a mi Blog puede jurar por lo más sagrado que no lo soy.
Dicho esto, tengo que reconocer que hay el personaje de Jesucristo me apasiona... este verano jugando a '¿a quién visitarías si viajaras al pasado?' me sorprendí a mí mismo respondiendo que a Jesús, pues me gustaría saber cuánto de loco y cuánto de visionario tenía ese tío.
Y hace unos días confirmé mis sospechas acudiendo al musical de Jesucristo Superstar que está de gira en Valencia.
¡Menudo hippy estaba hecho!, me gustan muchas cosas de Él. Sinceramente creo que hoy en día, la Iglesia (en su acepción de 'tinglado') echaría a patadas a un tipo como Él. Sería el clero el que echaría a Jesús de su templo, a una persona normal que tuviera la osadía de acoger a María Magdalena, o a amar al prójimo (sea de la religión y el color que sea).
En fin, que fui con miedo, como fan de la obra setentera cuya banda sonora pagué religiosamente (cuando se vendían en LP) y que volví a pagar religiosamente cuando salió en CD... y como cantante amateur de sus Greatest Hits (mis vecinos pueden dar fe de ello), iba con un poco de miedo por si los cantantes no daban la talla... pero la dieron, ¡vaya si la dieron!, y un Jesucristo celestial, junto con un Judas divino y una Magdalena de la que dirán lo que quieran pero canta como los ángeles... me hicieron estar en la gloria durante el tiempo que duró la función.
Nota mental: esta entrada está quedando pelín mística...

1 comentario:

Pepe Soriano dijo...

Ya quisiera Rita el vozarron de Judas.