¡Puta curiosidad! ¡Benditos niños!

Leo en Microsiervos que hace 30 años una cajera valenciana pasó el primer producto (un estropajo) por un lector de código de barras en Mercadona. Si bien la fuente corrige el dato y dice que hace 25, o eso dice Mercadona en su página web.
Esa efeméride se encuentra muy relacionada con mi cosmos, y la curiosidad de los niños, la curiosidad me llevó a preguntar por aquellas rayas que ya incorporaban muchos productos. Mi padre siempre fomentó y alimentó mi curiosidad, y lo más importante, la satisfizo en los momentos más insospechados y con las reacciones más curiosas. Me lo explicó; un rayo láser lee el código de barras en el supermercado..
¡UN RAYO LÁSER!... ¡¡RECIÉN ESTRENADA STAR WARS!!! ¡¡¡A UN NIÑO DE 10 AÑOS!!!
Irremediablemente tenía que verlo, nos recuerdo dirigiéndonos a Mercadona a ver como funcionaba el código de barras... no es que mi padre hiciera la compra, mi casa es de las de toda la vida y de esas cosas se encargaba mi madre (por otra parte él curraba más horas que un reloj), así que la compra consistió en ¡UN FUET!, armados de semejante artefacto nos dirigimos a la caja y la chica efectivamente me descubrió un mundo nuevo, en el que una lucecita roja (pues vaya mierda de rayo láser), leía el código y emitía un 'piiiip'...
Ha llovido desde entonces...
Hablando de llover... recuerdo una vez que estaba lloviendo... (pero eso es otra historia, y será otro post)